viernes, 17 de octubre de 2008

CRÓNICA DE UN DÍA ANUNCIADO

Día 17 de Octubre
Lo de siempre cuando se emprende un viaje de estudios. Chicos ansiosos en la puerta de la escuela acompañados de la familia que formula consejos y despedidas hasta de las más increíbles... "y si llueve... usá paraguas querido"... en fin estos rituales ya se han vuelto folclóricos así que una vez sorteados los mismos, partimos de Rosario a la medianoche con destino a San Rafael, Mendoza.
En viajes largos como estos y como otros, generalmente se para durante las dos primeras horas para que todo el mundo vaya al baño y llene los termos del mate, compre masitas, etc. Y así fue nomás, luego tuvimos que luchar unos minutos para convencer a algunos que subieran cuanto antes al cole porque querían un souvenir, un recuerdo de una estación de servicio que no merecía ningún recuerdo, ya que se encontraba en medio de la nada.
Seguimos acercándonos a San Rafael. El desayuno fue en Villa Mercedes, a eso de las 7 de la mañana. Ah! me olvidaba, créase o no, los chicos durmieron como angelitos después de las 3. Retomando, el desayuno fue abundante en medialunas y ya el estómago estaba reclamando una parada de este tipo. Lagañas, bostezos, café con leche, algún que otro colgado que reclama el desayuno cuando todos estábamos terminando, matizaron nuestra primera comida en tierra.
Panza llena, corazones contentos, seguimos camino...
Luego de una horitas... alguien estira la cabeza por detrás de un asiento y exclama, cual Pinzón, "Montañas a la vista!!!" y sí estábamos a un pasito y... ya llegamos nomás, cansados pero felices, sin respiro nos preparamos para almorzar... después vendría el reparto de piezas.
Fiambre de entrada, milanesas con puré y banana con dulce de leche y... tata tatan... el dueño del complejo Don Luis nos convida de obsequio con chocolates de la ciudad.
Pintó siesta?... NO!!!! ni ahí... esto recién comienza. Nos preparamos para las excursiones del día... City Tour (Dique Los Reyunos, Villa 25 de Mayo) y visita a la bodega Rivier.
"Las sensaciones que me despertaron los vinos fueron muchos recuerdos de mi bisabuelo, a quien le gustaba mucho esa bebida y de mi papá que también me enseñó a degustar el vino", escribió un alumno en su diario. "Me llamó demasiado la atención la represa por el paisaje", manifestó otro.
Después de tanto estudio e información, volvían los embates del hambre, se hizo la hora de la merienda y paramos en una plaza, frente al museo de los ferrocarriles a comer. Luego volvimos al complejo de cabañas donde cenamos unas ricas pizzas y ya, muertos de trajín, nos preparamos para el día siguiente.... Continuará...
PD: les debemos las fotos porque estamos escribiendo la crónica con Mariano desde un cyber del centro porque no había internet en el complejo pero si todo va bien mañana ya tendremos. Saludos


2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola! Somos los papás de Julieta Romero y estamos ansiosos por ver las fotos!! No se hagan rogar que queremos ver las caras alegres y cansadas de estar pasándola genial!!

Un beso grande!!

Anónimo dijo...

Hola a todos!! me alegro que hayan tenido un viaje tranquilo!! Me imagino que anoche deben haber descanzado bien y recuperado fuerzas para el largo día que hoy les tocaba vivir. Seguramente habran disfrutado y aprobechado al máximo esta jornada increíble! Estoy anciosa de leer el comentario de esta noche y de ver las prometidas fotos para de esta manera sentirme más cerca de ustedes. Les mando saludos y un gran CARIÑO para todos.......
NANCI(mamá de Alexis)